lunes, 23 de agosto de 2010

Si me gusta lo incorrecto y me faltan argumentos...
Soy el rey de lo imperfecto, si sólo tengo defectos.


Yo, que vivo en una alucinación,
no hago caso nunca a la razón,
pues me guío por el corazón.


No sentar nunca la cabeza,
poner los pies sobre la mesa,
para hacer sólo lo que yo quiero.
Dejarlo todo a la improvisación
y hacer que vuele la imaginación,
para hacer sólo lo que yo quiero.


En el cielo soy tormenta y en el cuento Cenicienta.
Si nunca tengo paciencia porque todo me revienta.
Yo, que no tengo ninguna ilusión,
soy el signo de interrogación,
de lo malo seré lo peor.


Sigo intentando que el mal no pueda con el bien,
y si me caigo intentaré caer de pie,
y si te fallo prometo no volverlo a hacer,
y si lo hago yo sólo lo disimularé...